Elemento

Gastronomía

Atrás Cochinillo Asado

Su edad no debe superar las tres semanas, con un peso ideal alrededor de los 4 ó 4'5 Kg.

 Preparación
• En una cazuela o asador colocamos unas tablillas, ponemos el cochinillo encima y de espaldas, echamos un poquito de agua, sazonamos por dentro y lo metemos al horno.
En el horno
• Estando a una temperatura aproximada de 200 grados, introducimos el cochinillo tal cual.
• Pasada una hora, lo sacamos, añadimos agua a la cazuela (que se habrá evaporado) y si ha cogido color le damos la vuelta.
• Ya con el lomo hacia arriba, se picotea la piel cuidadosamente, le damos una pincelada con aceite de oliva virgen, por todo el lomo y de nuevo lo metemos al horno otras dos horas aproximadamente.
• En la última media hora, estaremos pendientes por si fuera necesario proteger alguna parte por exceso de calor: orejas, patas...
• Cuando consideremos que está la piel dorada y crujiente puede estar asado y a punto, entonces lo sacamos definitivamente del horno y lo presentamos en la mesa.
Presentación y trinchado Por tradición histórica el cochinillo asado se presenta en la mesa entero, tal cual sale del horno. Se parte o trincha con un plato en presencia de los comensales. Es un ritual para mostrar el punto justo de cochura y de su ternura. El jugo o salsa lo rectificamos de sal y servimos aparte en puchero de barro, bien caliente.

El complemento perfecto a los asados castellanos, lo podemos encontrar preferentemente en nuestros buenos vinos de Crianza; por aquello de "la receta con los vinos del lugar", preferentemente de la D.O. Ribera del Duero.